Una semana después del inicio del voraz, fiscales y peritos por fin pudieron llegar a los contenedores ubicados en los aires del referido edificio, donde murieron encerrados con candado los jóvenes Jovi Herrera Alania (20) y Jorge Luis Huamán Villalobos (19), ‘Tubito’.

En una de esas trampas de metal, selladas con candados acerados, solo hallaron cenizas y restos óseos de dos personas que, se cree, serían de los desaparecidos.

Los cadáveres estaban esqueletizados y fragmentados por los más de 2 mil grados Celsius que produjo el incendio.

Los fiscales adjuntos provinciales Lizeth Adrianzén Budiel y Lennin Flores Rivero, junto a tres especialistas del Instituto de Medicina Legal del Ministerio Público, fueron al último piso del predio, con policías y bomberos, por una cochera de la cuadra 4 de la avenida Guillermo Dansey.

OXÍGENO
Los dos magistrados tuvieron que ser auxiliados por los paramédicos, que les colocaron oxígeno. Luego de tres horas, se informó del , que los expertos sacaron en bolsa negra sobre una camilla.

“Es un espacio donde no se puede estar mucho tiempo por el humo que hay. Las paredes se están cayendo”, dijo la fiscal Lizeth Adrianzén.

Remarcó que los contenedores estaban cerrados con candados blindados que los bomberos tuvieron que romper. “Encontramos un cráneo y otros restos óseos. Todos los candados han sido recogidos y puestos en custodia”, afirmó.

El otro fiscal, Lennin Flores, informó que en el contenedor había apilados cientos de fluorescentes hasta una altura de un metro 60. “Es difícil entrar, pero en un rincón se encontraron los restos. En la morgue se establecerá si son las dos personas que estaban desaparecidas, pero presumimos que son ellas”, dijo.

FAMILIARES
que se encontraban por inmediaciones de la galería recibieron la noticia del hallazgo de los restos y rompieron en llanto. “Culminó esta parte de nuestro suplicio. Ahora empieza otra, que es buscar justicia y hallar a los culpables. Murieron en una cárcel porque los encerraban con candado”, dijo Magaly Herrera, tía de Jovi Herrera, quien deja huérfana a una bebé.

Los parientes de Jorge Huamán, atribulados, se dirigieron a la Morgue de Lima.

(Jesús Palomino)

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