| Muy cerca al mirador de Oxapampa está, de donde viene un aroma adictivo, que ningún amante del café se puede resistir. El barista Alex Rodríguez tiene 28 años y está a cargo del lugar. Conoce a la perfección todos los métodos de extracción y la gran variedad de granos que se producen en la Finca San Alberto.  La pandemia mantuvo cerrada a la ciudad por dos años, pero aprovecharon para trabajar muy duro en el campo y conocer al detalle todo sobre estos benditos granos que hoy se exportan a Chile, Estados Unidos y Alemania.

Café-trome

Alex tiene tres años en esta profesión y nos cuenta que se convirtió en barista de manera empírica, pues se enteró que el dueño de la finca, el ingeniero José Santos Gallardo estaba dando unos cursos gratis de barismo y desde ese entonces nunca más quiso alejarse de esta carrera. Sus ganas de aprender lo motivaron a buscar la perfección, tanto así que hoy es el principal barista de esta reconocida cafetería de la ciudad.

“Nunca me imaginé que lograría tanto a tan corta edad, me siento agradecido con la vida y con el dueño de la finca que nos dio la oportunidad de crecer profesionalmente. Vengo de una familia de agrónomos que visionan mucho al café, pues genera mucho trabajo. Esto es de la chacra a la mesa. Hay que darle valor al agricultor, quien es el motor principal de esta cadena”, enfatiza.

En este local cuentan con cuatro tipos de cafés: el bourdon que es de un solo tipo, el blend que tiene ocho variedades de granos de la finca, la typica y el honey.

Oportunidad en medio de una crisis

Muchos negocios de Oxapampa la pasaron muy mal durante la pandemia, ya que la población tomó la decisión de cerrar sus puntos de ingresos para evitar que lleguen de afuera gente que traiga el virus, esta era una forma de cuidarse.

Fueron dos años, donde el encierro evitó el ingreso de turistas locales y extranjeros. Sin embargo, Betsi, quien acompaña a Alex, aprovecharon este tiempo para ir a la chacra junto a sus compañeros y conocer más sobre los granos de café.

“Como la cafetería tiene su propia finca decidimos ir a trabajar al campo, a conocer sobre los granos, aprendimos a seleccionar, trillar, el lavado y a tostar. También, aprendimos a catar y ver los métodos de extracción. Fue muy beneficioso para todos nosotros que queremos sacar adelante el producto y que sea conocido en la capital y en el mundo”, recalca Rodríguez.

Este local esta muy cerca al mirador. Altura de los pinos.
Este local esta muy cerca al mirador. Altura de los pinos.

Toda crisis trae una oportunidad

son cafés de especialidad y nacen de la finca San Alberto fortaleció sus canales de venta digitales (están en Facebook, Instagram y se vende por WhatsApp), a través de página . Y todos los que trabajan en este lugar decidieron unirse para sacar adelante este producto, haciendo que cada grano tome cuerpo y se perfeccione.

El café Honey que se produce en esta finca es orgánico, tiene un puntaje de 84 puntos. El reto que se han propuesto es llegar a los 86 puntos del valor de taza de café. “Los cafés se exportan a Chile y a Estados Unidos”, detalla Alex.

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