; de hecho, si hablamos de una afectación en la salud mental de las madre (ansiedad, depresión, estrés u otro) en relación con el desarrollo integral de sus hijos, tendremos que decir que el resultado es un fuerte impacto en la maduración cerebral, ya que la falta de empatía, sensibilidad emocional y la capacidad para percibir señales del niño e interpretarlas correctamente; nos hará tener una reacción muy pobre frente a lo que los niños necesitan, señala Rommy Ríos, gerente de la Fundación Baltazar y Nicolás y vicepresidenta de Copera Infancia.

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Los datos que nos ofrece la Encuesta Continua ECIC-19 son alarmantes, saber que siete de cada diez cuidadores/as, tiene dificultades de afrontar la tarea de padres, manejar las pataletas de los niños y manejar bien las tareas de cuidado y crianza de los niños, nos pone un panorama sombrío, frente a las habilidades que los niños puedan desarrollar de la mano de estas madres, que tienen estas dificultades, quizás reflejadas de los altos niveles de estrés, ansiedad y depresión que las agobia, agrega Ríos.

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BUENOS CONSEJOS

Si bien es importante resguardar la salud mental de los menores, también es indispensable tomar acción respecto a la salud emocional de las madres, ya que esta influye en el desarrollo y crecimiento de los hijos, así como en la relación de la pareja y la familia. En línea con ello, en el marco del Día de la Madre que se celebra cada segundo domingo de mayo, la especialista da a conocer algunas recomendaciones para cuidar la salud mental de las madres:

1. Desarrollar actividades para compartir y fortalecer el vínculo

La importancia de distribuir las tareas en el hogar resultan siendo fundamentales, para fortalecer la unión familiar, incluyendo en las mismas la participación de todos.

2. Expresión emocional

Aprender a comunicar lo que sentimos es una tarea fundamental en todas las personas, debemos aprender a no reprimir emociones y a tener una comunicación constante en la familia. Para ello, las actividades artísticas y lúdicas ayudan a explicar un tema o preguntar sobre cómo se sienten dentro de casa y qué consideran se debe mejorar para la convivencia.

3. Evitar el  estrés

Es importante  compartir las tareas, reconocer que NO podemos hacerlo todo y  llevar a cabo actividades que permitan recrearnos de forma individual (yoga) o alguna actividad recreativa, que puede desarrollarse en el campo junto con los niños.

4. Buscar apoyo y acudir a un especialista

Recurrir a un psicólogo y contar con la asesoría de un especialista ayudará a conocer mejorar el manejo de las emociones tanto a nivel personal como en la familia en general.

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