Corazón caliente, cabeza fría. Porque si la ansiedad por ser campeón puede invadir al plantel de , el técnico acaba de arrojarles un balde de agua helada. Nada de desconcentraciones y cero distracciones.

El ‘Profesor’ diseñó unas clases especiales que incluyen el menor contacto con la prensa en Alianza Lima. Los victorianos entrenaron ayer, por la tarde, sin acceso a los medios, algo que se repetirá mañana, jueves y viernes. Hoy será el único día donde declararán y después todos repetirán la frase: ‘En boca cerrada no entran moscas’.

Alianza Lima viajará el viernes a Chiclayo y allí entrenará a puertas cerradas. El sábado se trasladará a Cutervo y el domingo se jugará la vida ante Comerciantes Unidos. Una estrategia que busca aislar de cualquier exceso de confianza.

En medio de esta planificación, el volante Luis Aguiar dio un ejemplo de lo que podría ser el ‘irse de boca’. Por la mañana declaró a Radio del Sol, de Uruguay, que si lo llaman de Peñarol ‘volvería gateando’. Por la tarde, aclaró sus palabras en Alianza Lima. “Si algún equipo quiere ficharme tendrá que pagar una cláusula, pero no tengo ofertas para irme”, señaló. 

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