Recuerda el día que el Chavo llegó a la vecindad

Quizás muchos televidentes no lo recuerdan, pero hubo un episodio en el preciso momento que el Chavo llega a la vecindad.

Aunque esta escena sí logró emitirse en la década de los 70, son pocas personas que rememoran cómo este niño hizo su aparición en dicho lugar.

Si aún no sabes a qué nos referimos, no te preocupes que te lo contamos a continuación.

En un capítulo de la serie televisiva se ve a la Chilindrina, el Chavo y Don Ramón viendo un álbum de fotos cuando de pronto se detienen a ver una de las imágenes.

Es en ese momento que Don Ramón les menciona que la foto, donde sale él con su cámara, es el día en que el Chavo llegó a la vecindad.

Él les cuenta que en esa oportunidad iba a fotografiar a la Chilindrina porque estaba cumpliendo 4 años.

Mientras Don Ramón alistaba a una pequeña Chilindrina para captar su mejor ángulo y tomarle una foto, ingresa un niño y se pone delante de ella.

El pequeño, quien se encontraba sin zapatos, ropa grande y con una tela amarrada a un palo donde llevaba sus cosas, no dijo nada pese a que le pedían que se retirara de la toma.

“¡Niño, te tenías que atravesar precisamente en el momento que le voy a tomar una foto a mi hija!”, le dice Don Ramón, pero al no obtener respuesta le vuelve a preguntar: “¡Niño, te estoy hablando, quítate! Digo, ¿no me estás oyendo, bueno pues, ¿qué traes?”.

A lo que el Chavito le responde: “¡Hambre!”. En ese instante, Don Ramón voltea y pasa saliva como lamentando la situación del pequeño.

Ante ello, el papá de la Chilindrina le consulta si quisiera una torta de jamón, algo que alegra al niño, pero se le acaba la sonrisa cuando Don Ramón le dice que él único problema era de dónde iba a sacar ese emparedado.

Tras recordar la llegada del Chavo a la vecindad, la Chilindrina le pregunta si recuerda que al verlo descalzo le regaló los zapatos de su papá, a lo que él muy contento le dice que los llevaba puestos hasta la fecha. Algo que los conmovió.

Después de esto, Don Ramón solo atina a decir: “Bueno, pero es bonito ver fotografías, ¿verdad?”.