SEDIENTO
SEDIENTO

Los niños sufren el intenso calor de esta temporada no solo cuando salen de casa con dirección al colegio, sino también en las largas formaciones escolares donde permanecen parados y producto de ello sufren incluso desmayos. Si no quieres que tu hijo sea uno de los afectados, hidrátalo.

Romy Mayta, médico de ‘B Braun’, afirma que los niños pueden sufrir pérdida excesiva de agua y sales minerales producto del golpe de calor, que por estos días es muy frecuente. Esto hace que los menores sufran mareos y falta de fuerza.

PARA PREVENIR
Coloca en la lonchera de tu hijo bebidas rehidratantes orales (no deportivas). Las venden en tiendas y farmacias. Estas contienen agua, azúcares, sodio y sales, por lo que restituyen los nutrientes perdidos en una exposición solar. Dale a tu pequeño agua pura y muchas frutas jugosas como naranjas, fresas y sandía.

ALERTA
Un niño deshidratado puede presentar malestar (Mareos, dolor de cabeza, calambres y sequedad de mucosas), sed constante (Cuando un niño dice que tiene sed por lo general ya está deshidratado en un 2%), orina distinta (el color oscuro y concentrado quiere decir que está deshidratado, entre más claro sea significa que está tomando agua correctamente), cambios en su ánimo (Somnolencia, apatía, irritabilidad y nerviosismo) o pérdida de peso (una deshidratación leve puede disminuir hasta el 5% del peso corporal; una moderada, entre un 5% y 10% y una severa, entre el 10% y 15%).

tags relacionadas

NOTICIAS SUGERIDAS

Contenido GEC