Una mujer de Escocia se disponía a sacar a su perro a pasear cuando notó que algo extraño le sucedía. Y es que había dejado un cigarrillo de al alcance de su , quien no dudó en comérselo completo. Ahora su reacción es en .

Gunnar es el nombre del enorme perro, raza Braco de Weimar, que tomó por accidente las drogas de su dueña, Chloe O'Neill. ‘No todos los días tu perro está drogado porque comió un cigarrillo de marihuana y es llevado a la veterinaria’, dijo la mujer en su tuit.

El can se muestra desorientado, tambaleante y con los ojos cristalizados. Apenas se puede mantener en pie. ‘¿Estás bien?’, le pregunta Chloe al verlo en ese estado.

La publicación en Twitter generó una gran cantidad de reacciones. Desde personas que le reprochaban por no tener más cuidado hasta algunos que la criticaban por exponer al animal de manera graciosa.

Asimismo hubieron otros que más bien se preocuparon por el ‘trip’ de Gunnar y algunos más que se atrevieron a contar experiencias parecidas. Y es que las travesuras de los perritos son a veces muy difíciles de controlar.

O’Neill tiene un perro más, que parece ser tan inquieto y curioso como su compañero. Se trata de un Setter llamado Rubén.

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