Las hijas de Ana Martínez, una de las víctimas del , no solo atraviesan una dolorosa situación por la pérdida, sino que a esto se suma que tendrán que esperar unas horas más para retirar el cuerpo de su progenitora de la Morgue Central de Lima.

“Nos han dicho que no podemos retirar su cuerpo porque aún no ha sido identificada plenamente. Mi madre no puede ser reconocida porque está carbonizada.  Y por el feriado largo se está alargando este proceso”, expresó entre lágrimas Amina, una de las hijas de la mujer fallecida.

En ese sentido, la joven pidió a las autoridades agilizar este trámite para poder dar cristiana sepultura a su madre, quien era trabajadora del cine UVK, y carbonizada tras quedarse en el interior del local para ayudar a escapar a otras personas.

En tanto, Constanza Remar, expresidenta de la Comisión de Seguridad de Edificaciones del Colegio de Arquitectos del Perú, indicó a América Noticias que la tragedia pudo haberse prevenido de subsanarse una serie de observaciones advertidas por el Colegio de Arquitectos del Perú, que rechazó hasta en siete oportunidades los pedidos de ampliación del centro comercial Larcomar.

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