Camino de la vergüenza. No terminó la construcción del puente Balvín, en , y su castigo fue "pasear" en burro en medio de las pifias y reclamos de los vecinos. 

Se trata del gerente general del distrito de Pariahuanca, quien a golpes, fue obligado a subirse al lomo de un burro. ¿La razón? El incumplimiento de la construcción del mencionado puente, único medio de acceso a la zona.

Pero no fue el único que fue sometido a esta humillación. El alcalde de Pariahuanca también fue paseado en burro por los indignados vecinos.

Las autoridades de Pariahuanca recorrieron las calles de la ciudad en burro acompañados de los manifestantes, quienes exigieron que se cumpla con la construcción del puente.

Según América Noticias, el funcionario junto al alcalde del distrito son acusados de omisión de funciones por no ejecutar con prontitud la construcción del puente Balvín, que ahora significa un peligro para los transportistas y vecinos.

NOTICIAS SUGERIDAS

Contenido GEC