El de José Yactayo fue un crimen espeluznante. El estudiante Wilfredo Zamora Carrión (27), ‘Willy’, conoció a Rodríguez (56) en una página gay de Internet, iniciaron una íntima relación y dos semanas después, lo asesinó. Según él, el periodista falleció cuando tomaban licor y luego, en su desesperación, descuartizó el cadáver, pero la policía no cree en su versión.

La noche del sábado 25 de febrero, ‘Willy’ llamó a José Yactayo para invitarlo al departamento donde vivía. Semanas antes, ambos se conocieron a través de la cuenta de Facebook MGFC (Maju Gay Facebook Club).

Sin imaginar el trágico final que le esperaba, José Yactayo acudió a la cita. En el apartamento 801, del condominio ubicado en la calle Pedro Ruiz Gallo 668, en Breña, empezaron a tomar alcohol.

“Estábamos tomando y se murió”, dijo ‘Willy’ a los agentes. Sin embargo, para los detectives esta versión es falsa, pues al periodista audiovisual lo estrangularon.

‘Willy’ continuó su sórdido relato y confesó que cercenó el cadáver. “Me asusté al verlo muerto y para no tener problemas, lo descuarticé”, manifestó.

MALETA
Para los investigadores, alguien habría sugerido al asesino que desaparezca el cadáver. Por eso el 27 de febrero, dos días después del crimen, el estudiante de Ingeniería Mecatrónica en una universidad privada metió las partes del cuerpo en una maleta, que introdujo en el carro estacionado en el garaje. Luego se dirigió a Huaura.

“Después llegó hasta la zona agrícola Catalán, en el kilómetro 39 de la carretera a Río Seco, donde quemó el tronco y brazos”, dijo un agente.

Agregó que el homicida reveló que las piernas y la cabeza del periodista, que hasta la fecha no son halladas, las arrojó en el camino por la variante de Pasamayo.

Con ayuda de Aldo Cáceda (70), con quien convivía en el departamento y tenía una relación sentimental, viajó a Panamá.

Dicho personaje adquirió los pasajes para ‘Willy’ a través de Internet. Confiado en que la policía no lo descubriría, el homicida regresó al país.

La noche del viernes, los detectives de Homicidios, con la orden de detención expedida por un juez, fueron a la casa de Breña. Tocaron la puerta, el asesino abrió y lo detuvieron.

LLAMADAS
Según las pesquisas, Wilfredo Zamora, natural de Trujillo, convivía con Aldo Cáceda, ingeniero que trabaja para una empresa aérea en Estados Unidos. Por ello, se sospecha que el móvil del horrendo crimen haya sido pasional.

Las pistas que permitieron dar con el asesino fueron las llamadas del celular de José Yactayo cuando ya estaba muerto, así como declaraciones de testigos y la visualización de videos.

En el escenario del crimen se realizó la prueba de Luminol en busca de manchas de sangre, a fin de corroborar los indicios. Peritos de Criminalística de la Dirincri usaron el reactivo ‘Bluestar’ en la habitación.

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