Vivía con el enemigo bajo el mismo techo. El jubilado Juan Humberto Burga Ubillús (74), de apenas 4 años y, para evitar ser apresado, quemó su casa para quitarse la vida en . Sus intentos fueron en vano ya que los agentes de la comisaría de 10 de Octubre lo rescataron y condujeron a la delegación.

Fue la madre de la pequeña quien descubrió el aberrante hecho, al ver a la pequeña con su pantaloncito a la altura de las rodillas. De inmediato avisó del terrible hecho a los policías de la delegación de 10 de octubre en San Juan de Lurigancho. Al llegar a la casa, en el asentamiento humano Huanta II, notaron que el agresor sexual prendió fuego a su habitación de madera.

Los policías rápidamente lo rescataron del lugar mientras que los bomberos apagaron el fuego. En la delegación en San Juan de Lurigancho, fue sometido a interrogatorio y ante las pruebas del terrible hecho terminó por confesar el delito.

La mujer contó que dejó a su niña jugando con sus muñecas mientras ella tendía la ropa y este tipo aprovechó para cometer la aberración. El jubilado fue derivado a la fiscalía de San Juan de Lurigancho.

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