Minero moqueguano vivió engañado durante 18 años y ahora quiere que le devuelvan su dinero. (Fotos: Trome)
Caso minero Arequipa

Una historia de telenovela es la que vive un minero de , tras descubrir mediante una prueba de ADN que durante 18 años su expareja le hizo creer que era el padre de su hijo. La mujer logró que judicialmente se le otorgara una pensión de alimentos a su vástago, dinero que mes a mes le fue descontado de su sueldo al engañado sujeto.

Víctor Raúl Maldonado Condori decidió contar su caso, ya que hasta el momento no ha podido obtener del Poder Judicial de Arequipa una resolución favorable para que se le deje de descontar un porcentaje de su sueldo por concepto de pensión de alimentos y que aún estarían usufructuando Nancy Ventura Apaza, sabiendo que el denunciante no es el padre de su hijo.

La historia del obrero se remonta al año 2001. Víctor conoció a Nancy en Ichuña, en Moquegua, tuvieron una relación y al cabo de un tiempo él se fue a trabajar a Lima. Al año retornó para una fiesta patronal de Arequipa y Nancy le dijo que había sido padre. Cuando trató de oponerse legalmente a la filiación ya era demasiado tarde, pues por ley solo se le concede al supuesto padre 90 días a partir del registro del menor, que en este caso lo hizo la mujer con el consentimiento del padre de Víctor.

Durante los años posteriores Víctor trató, a través de audiencias judiciales, solicitar una prueba de ADN que nunca se le concedió porque la madre se oponía a ello. Hasta que en junio de 2017 fue la propia Nancy quien inició un nuevo proceso de filiación e hizo que notificaran al obrero en la casa de sus padres, sabiendo que nadie vería el requerimiento judicial.

El último día que tenía para presentarse a la prueba, la cuñada de Víctor vio la notificación y de ese modo fue que se presentó para someterse a la prueba. En agosto del año pasado un juez de paz de Paucarpata ,  resolvió con los resultados de ADN que Víctor no era el padre, sin embargo, aún no puede lograr que se le deje de recortar su sueldo.

PIDE JUSTICIA

“No tengo nada contra el muchacho a quien he visto a los 4, 8, 12 y 17 años contadas veces, él es una víctima más, porque también ha vivido engañado por su madre. Es ella quien ha mentido y sigue haciendo daño porque se está aprovechando de la situación”, refirió.

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