Su inteligencia genera asombro y es orgullo peruano. El pequeño solo tiene tres años, pero sus habilidades para sumar, restar, multiplicar y hasta traducir con facilidad al inglés, lo convierten en un genio. Incluso toca el órgano leyendo el pentagrama musical.

André juega, habla, salta, corre y se comporta como cualquier niño, pero su prodigiosa mente y su capacidad de análisis e interpretación sorprenden a todos.

ESTIMULACIÓN TEMPRANA

Sus padres, Rossana Jancco y Ángel Espinoza, contaron a Trome cómo su hijo fue demostrando su inteligencia y habilidad. “Desde que estaba en la barriga le leíamos cuentos, le poníamos música clásica y nuestro pequeño se alegraba. Cuando cumplió meses de nacido lo matriculamos para que practique estimulación temprana”, dijo la feliz madre.

Agregó que a la edad de dos años, André Santiago demostró que ya sabía contar y leer con gran claridad cuentos y poemarios. Luego fue aprendiendo a traducir del inglés y tocar temas musicales con el órgano leyendo las partituras.

INICIAL

El pequeño André Santiago nació en Ate y junto a su otro hermano, próximo a cumplir dos años, se alimentan con quinua, maca y mucha fruta. “Nuestros hijos crecen saludablemente, por eso tratamos de inculcarles que coman verduras y frutas”, indicaron.

Resaltaron que cursa la educación inicial en la Institución Educativa Inicial ‘Dieguito Thomson’ y que al culminar su educación secundaria pedirán una beca para que estudie en el extranjero.

ASÍ ES LA COSA
El pequeño André, sus padres y su hermano viven en Ate. Su papá es comerciante y su mamá, ama de casa. A los dos años aprendió a leer y se alimenta de quinua, maca y frutas

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