destacó en ajedrez, tenis de mesa, pero ama el fútbol y allí se quedó. Es solidario en la cancha porque fuera ejerce la fe al ser superior. Nunca un mal gesto, siempre una mano amable y una sonrisa del hijo que ha adoptado el pueblo.

Tiene un sello: su entrega. Una marca: su sonrisa. Aldo Corzo se ha convertido en el engreído del pueblo, al que todos saludan y siempre responde con un gesto amable. Lo aceptaron desde la primera vez que lo vieron luchar una pelota y lo ‘adoptaron’ el 10 de octubre, cuando arriesgó su integridad física. Puso el rostro para evitar el rechazo del colombiano Frank Fabra y provocó el tiro libre que culminó en golazo de Paolo Guerrero.

Desde ese instante, todo cambió en su vida. Su cuenta de Twitter subió de casi 4 mil seguidores hasta más de 16 mil. Las ‘Corzolovers’ se multiplican en el Perú. Sitio que visite, las muchachitas suspiran y reciben un saludo con la mano o regala un beso en la mejilla. Es que Aldo Corzo tiene las cosas claras. Viene de una familia constituida y los fines de semana asisten todos a misa.

El balompié, en este caso, no lo salvó, más bien ganó un deportista a carta cabal. En sus años de escolar, Aldo Corzo fue bueno en ajedrez y también en tenis de mesa. Sus profesores lo querían en la selección del colegio, pero el ‘balón’ es su imán, del que no se pudo despegar.

Empezó en Alianza y debutó profesionalmente en el 2008, pero en el 2010 la San Martín lo fichó por una mejor propuesta económica. Aldo Corzo se quedó hasta el 2015 y partió a Deportivo Municipal. Todo el 2016 defendió la ‘franja’ y esta temporada arregló con Universitario. Cuentan sus cercanos que es la camiseta con la que simpatiza y por eso es su mejor año.

Pero hay algo que ha dejado inconcluso: la carrera de Administración de Empresas. Los entrenamientos y los viajes lo han obligado a dejarla en stand by. Y seguro la culminará, porque alcanza todo lo que se propone: un día eligió ser futbolista profesional y ya jugó por los más grandes del país. Después lo convocaron a la selección y se trazó el objetivo de clasificar al Mundial y también lo logró. Aldo Corzo se avienta de cara por hacer realidad su sueño. Pertenece a una raza en extinción.

DATAZOS

-1020 minutos jugó en 12 partidos de Eliminatorias y 2 de repechaje. 10 partidos completos y en 2, sustituido.
-Aldo Corzo debutó en la séptima fecha ante Bolivia aunque fue convocado dos fechas antes (Venezuela).
-En todo el proceso, le mostraron dos veces la tarjeta amarilla, por eso no alineó ante Bolivia.
-Aldo Corzo tiene contrato con Universitario todo el 2018 y espera emigrar después del Mundial

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