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Pasaron 168 minutos para que los anfitriones griten un gol de su selección en la . A poco del final en el , apareció en escena Mohammed Muntari para convertir el 2-1 del partido válido por la segunda jornada del grupo A del certamen. Además, el volante añadió la cuota de emoción al juego.

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Por el trámite, todo hacía presagiar que el local iba a marcharse sin convertir. Sin embargo, el conjunto de Félix Sánchez mejoró a punta de vergüenza deportiva, más que con argumentos desde el juego. De ese modo, el portero Edouard Mendy tuvo más participación en estos pasajes de la contienda.

Además, Senegal retrocedió por la ventaja que consiguió por los tantos de Boulaye Dia (41′) y Famara Diedhiou (48′). Ello fue capitalizado por el representativo de Qatar que tuvo espacio y tiempo para salir jugando desde el fondo sin presiones. De ese modo, llegó un servicio largo hacia la punta en terreno africano.

Hasta ese lugar llegó Ismaeel Mohammad, quien estiró la pierna para amortiguar el globo. De inmediato, el lateral se aproximó al área grande y enfrentó a un adversario. Sin opciones de superarlo en el mano a mano, el defensor lanzó un servicio preciso sobre el terreno del golero que actúa en el Chelsea. Allí, Muntari entró con todo para meter un cabezazo y establecer el 2-1.

Como es natural, todo el público local celebró esa conquista como si se trata de una diana que le otorgue los tres puntos o el pase a la próxima ronda. Banderas agitadas, saltos, gritos y toda la alegría de los hinchas que se quedaron con las ganas en la inauguración, pero que esperaron por 168 minutos para manifestarse.

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