¡! Tener un CV que acredite estudios, diplomados, idiomas o muchos años de experiencia, parecen motivos suficientes para contratar a un empleado. No obstante Trome, durante los últimos años, la competitividad en el mercado ha hecho que las empresas no solo demanden personas con grandes habilidades técnicas, sino que ahora se valoran más las habilidades blandas asociadas al comportamiento de la persona, su desempeño social, liderazgo y manejo emocional.

Para Ignacio Hernández, director ejecutivo de la consultora Michael Page Perú, existe una evolución clara por parte de las empresas por valorar cada vez más la parte blanda del candidato, en la que resalta más la actitud que la aptitud. ¿Por qué? Bien simple Trome: muchos buenos trabajadores aprenden en la cancha lo que necesitan para desempeñarse con éxito en su puesto, pero no todos son capaces de generar empatía, liderazgo, iniciativa e ir más allá de las expectativas. Eso, por lo general, depende más de las habilidades blandas que de las duras.

Por ese motivo, las consultoras en temas de recursos humanos recomiendan que las empresas modernas busquen profesionales que destaquen más por sus habilidades blandas. Es decir, personas con capacidad para alinearse a la cultura de tu empresa para que se desarrolle y crezca contigo. Aunque dentro de las pequeñas y medianas empresas las habilidades duras –conocimiento sobre el área en la que uno se desarrolla- son de vital importancia, las competencias en materia de relacionamiento van ganando terreno. 


De estas habilidades blandas depende la posibilidad de introducir innovación y creatividad a tu negocio. Es decir, en tu taller de maquila existen 10 personas que hacen bien su trabajo pero es otra cosa tener 10 personas con iniciativa pensando en cómo mejorar los procesos de producción y ahorro de costos en beneficio del negocio. Y no creas que son habilidades para el personal relacionado con el cliente, como ventas. Estas son para todos los colaboradores, sin importar su posición.

Me gusta tío Trome, pero ¿cuáles son esas habilidades? Tranquilo sobrino, aquí te las enumero. Identifica estas habilidades en tus empleados o búscalas entre los postulantes a una vacante. De ellas podría depender el próximo salto de tu empresa:

1. Buena comunicación. Hablar claro, saber transmitir un mensaje.
2. Buena organización. La persona organizada es más ordenada.
3. Trabajo en equipo. Un grupo de personas logra más cosas que una sola.
4. Puntualidad. Llegar temprano y entregar el trabajo a tiempo es clave.
5. Pensamiento crítico. Capacidad de análisis de su entorno y de sí mismo.
6. Sociable. Una persona retraída no sabe integrarse a un equipo.
7. Ser creativo. Tener herramientas para hacer las cosas mejor cada día.
8. Habilidades interpersonales de comunicación. Saber expresarse.
9. Facilidad de adaptación. Capacidad para un día ser de ventas y otro de operaciones.
10. Personalidad amigable. Es mejor trabajar en confianza que andar desconfiando.

Ya lo sabes Trome, busca estas habilidades entre tus colaboradores o ayúdelos a que las desarrollen. Gracias a ellas tu negocio podrá seguir creciendo

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