(Fotos: José Rojas)
Brunella Horna

a sus cortos 22 años, es una próspera empresaria y también una mujer enamorada. Cuenta que su relación con es sólida, que el congresista es el complemento de su vida y su ‘consejero’ en el plano empresarial, pues siempre la alienta para que siga creciendo con sus tiendas. Un dato más, sus amigas la llaman ‘abuela’ porque siempre está trabajando.

Tienes 15 tiendas de ropa y acabas de inaugurar tu primer spa, ¿te sientes una mujer realizada a tus 22 años?
No. Considero que aún me falta más. Me voy a sentir realizada cuando mis negocios estén encaminados solos
y no sea necesario que esté ahí.

¿Sacrificaste el hecho de disfrutar de tu juventud para crecer como empresaria?

Sí. Mis amigas me llamaban para viajar o para ir a comer algo, pero decía que no. Cada sol me suma. Antes mis papás me daban plata y la gastaba, pero ahora valoro más las cosas porque todo me cuesta y cada sol puede ser un aporte para mis negocios.

¿Eres ‘tacaña’?
Tacañísima. Todo el mundo me fastidia con eso, soy muy tacaña hasta conmigo y con todos.

¿Te privaste de muchas cosas por tus negocios?
Claro. Gracias a los eventos que hacía en las discotecas, tengo mis tiendas. Lo que sacaba en un evento era para comprar un rollo de tela. Muchas veces me he privado de salir, pero no solo por el tema económico, sino porque a veces quería ir con mis amigas a Barranco para pasearme de bar en bar, como lo hace todo el mundo, pero es incómodo porque te están grabando.

Tus amigas te deben de ‘vacilar’ porque no sales a divertirte como ellas...
Sí. Me dicen que soy una ‘abuela’. Hace poco me fui a Máncora con mis amigas y era la mamá de todas. Las cuidaba.

De vez en cuando te señalan como una ‘chica pituca’...
De pituquita no tengo ni un pelo, porque soy recontra provinciana y la gente de Gamarra lo sabe, pues paro por ahí visitando mis tiendas.

Te va bien como empresaria y en el amor, pues el próximo mes vas a cumplir dos años con Richard Acuña...
Sí. El tiempo se ha pasado super rápido, nos llevamos bien, tenemos mucha química y cada uno tiene su propio espacio. Yo voy a trabajar, pero él sale más temprano porque tiene que llevar a sus hijos al colegio. No nos vemos hasta las 10 de la noche, los sábados los pasa con sus hijos y el domingo se turna conmigo. Nos vemos muy poco, pero lo complicado es lo que te atrae más.

¿Richard es tu complemento?
Sí. Mi complemento, mejor amigo y consejero. Mil veces me he querido caer por el estrés de mis negocios y tirar la toalla, pero él me daba ánimos. Si no fuera por Richard, ya estaría en mi cama llorando.

¿Consideras que es la relación más seria que has tenido?
Solo he tenido dos relaciones, tampoco quiero ‘rajar’ de mi ex (Renzo Costa), pero hoy en día me siento bien y estable.

¿Te ves al lado de Richard hasta el final de tus días?
Es lo que deseo. Me veo junto a él toda mi vida. Existe respeto, comprensión y confianza, pero sobre todo comprensión, porque él tiene un trabajo complicado. Hay días que no lo veo, sale muy temprano de casa y llega cuando ya estoy durmiendo, pero el amor lo puede todo.

¿Cómo hacen para lidiar con la presión y carga política que tiene él?

Richard sabe sobrellevarlo muy bien y separa los temas del trabajo con la familia. Él llega a la casa y se olvida de todo, fue una de las cosas que me enseñó, porque me dijo: ‘Los problemas se quedan en el trabajo y punto’.

En los pocos tiempos que están juntos, ¿cómo se engríen?

Yo soy bien engreída, él me engríe más a mí que yo a él. Richard es superdetallista.

¿Le cocinas algo?
Ninguno de los dos cocina. Somos muy caseros, no salimos mucho y si tomamos algo, lo hacemos en casa para no dar que hablar.

¿De qué forma te gusta engreírlo?
Lo mejor que puedo hacer es escucharlo y valorar cada tiempo que tenemos. Hay que valorar el tiempo en vez de renegar, tal como lo hacía al inicio.

¿Consideras que la diferencia de edad es solo un prejuicio?
Nos llevamos 12 años, pero él no aparenta su edad y yo me veo un poco mayor con maquillaje.

¿Tienen los mismos gustos?

Somos provincianos y tenemos muchas cosas en común. La misma forma de comer, nos gusta ir a un ‘huequito’ para comer cebiche y las costumbres norteñas son las mismas. Somos bien campechanos.

En un futuro... ¿te gustaría formar una familia y tener hijos?
Lo hemos conversado muy a la ligera, quiero ser mamá, pero tengo 22 años y no me apresuro. Él tampoco lo hace, porque ya tiene 4 hijos y son parte de la familia. Yo solo quiero un hijo, porque ya serían cinco hijos en total.

¿Te llevas bien con sus hijos?
Conozco al mayor, pero a los menores aún no.

¿Te gustaría casarte con Richard o piensas que un matrimonio no te asegura la felicidad?

Antes pensaba que era bonito casarse, pero ya no pienso igual. Él vive conmigo, soy feliz, me respeta, valora y soy la novia. Un papel no me hará más.

Te han hecho fama de celosa. ¿Lo eres?

No soy celosa, pero una siempre tiene que estar atenta y viva en todo, pero él no me da, ni nunca me ha dado, motivos para desconfiar. 

tags relacionadas

NOTICIAS SUGERIDAS

Contenido GEC