Cada cuenta con 26 huesos, todos importantes porque gracias a nuestros dos pies se sostiene el cuerpo y podemos caminar.

Un pie posee tres regiones (igual número que las regiones de la mano) y son: tarso (tobillo y talón), metatarso (región del empeine) y dedos, conocidos como falanges.

El tarso está integrado por siete huesos cortos y robustos que se conocen como: astrágalo, calcáneo, navicular, primer cuneiforme, segundo cuneiforme, tercer cuneiforme y cuboides.

El metatarso se compone de cinco huesos llamados metatarsianos o metatarsos.

Los dedos tienen 14 huesos que se llaman falanges: proximales (vecinos de los metatarsos), mediales y distales (al final del pie). Todos los dedos cuentan con tres falanges, salvo el pulgar, que posee solo dos.

Únicamente los dedos gordos (pulgares) son básicos para que las personas mantengan el equilibrio erguidas sobre sus dos piernas, pues el resto no representa gran influencia al andar, ya que uno puede acostumbrarse a caminar si le falta cualquiera de ellos.

A diferencia de las manos, los pies no cuentan con la capacidad de aprehensión (agarrar), porque sus dedos pulgares carecen de esa función.

TOMA NOTA...
* Cuidado especial requieren los dedos de los pies, ya que son delicados y pueden lesionarse al practicar deportes, correr y ser golpeados (sobre todo cuando algo pesado les cae encima). Los zapatos sirven para protegerlos.

+DATOS

* Usar zapatos muy grandes o ajustados causa dolores en los dedos del pie.

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