Familia
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Aunque muchos digan que no, siempre existe un hijo preferido en la familia. No está mal que un padre o madre lo tenga, el problema radica en expresarlo y decirlo frente a sus hermanos.

Seguro hemos escuchado a los papás decir: ‘Yo quiero a mis hijos por igual, sin favoritismos’. Sin embargo, sus actos y palabras muchas veces los desmienten. La psicóloga y psicoterapeuta Juliana Sequera señala que no es necesario ni decirlo, basta con soltar frases como: ‘Tu hermano no era así a tu edad’ o ‘¿por qué no eres como tu hermano mayor?’

“Cuando lo comparas dañas su autoestima y confianza en sí mismo, afectas su capacidad de liderazgo y creas sentimientos de enemistad y rivalidad entre ellos, así como heridas emocionales que tardarían mucho tiempo en sanar”, advierte la experta.

MALA RELACIÓN

Lamentablemente, agrega, si esto no se corrige a tiempo, tus hijos no generarán lazos familiares fuertes, crecerán con celos y, de grandes, no tendrán una buena relación”, alerta.

¿QUÉ HACER?

Cambia tu conducta y reconoce el valor de cada uno de tus hijos. “Resalta sus virtudes y cualidades por igual para que se sientan importantes y únicos; además, demuéstrales que los quieres de la misma manera. Y evita decir: ‘por qué no eres como...’”, aconseja Sequera.

SABÍAS QUE...

Estudios concluyen que el favoritismo es un hecho innegable en las familias, aunque se presente de distintas formas y por diversos motivos.

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