Tendencia aparece bajo el hashtag #barkatyourdog y los videos tienen actualmente casi 160 millones de visitas. Foto: ¡Stock.
Tendencia aparece bajo el hashtag #barkatyourdog y los videos tienen actualmente casi 160 millones de visitas. Foto: ¡Stock.

Incluir a nuestras mascotas en los videos de puede resultar inofensivo y hasta divertido para nosotros, pero para ellas es un suplicio. Los veterinarios advierten que esta tendencia, que consiste en que los dueños de perros les devuelvan los ladridos y graben su reacción, puede tener consecuencias peligrosas para ambos.

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El reto #barkatyourdog (ladrar a tu perro) tiene actualmente casi 160 millones de visitas y consiste en acercarse a la cara del perro, ladrar fuerte y grabar la reacción del animalito.

La mayoría de los canes parecen confundidos, algunos responden mirando fijamente a su dueño en estado de shock, pero a otros se les puede ver dando un gruñido feroz, advirtiéndoles de que se retiren.

Shauna Spooner, enfermera veterinaria de la organización benéfica PDSA, criticó esta tendencia, diciendo que podría tener “consecuencias peligrosas”.

“Siempre hay nuevas modas y tendencias que se hacen populares y que mucha gente quiere copiar, pero cuando las mascotas están involucradas es importante detenerse y pensar antes de participar. Esta de ladrar a tu perro podría alterar fácilmente a tu engreído, haciendo que se sienta confundido, asustado y/o conmocionado”, explicó al MailOnline.

Los perros se desconciertan, se asustan y pueden reaccionar con agresividad, además pierden la confianza en sus dueños. Foto: ¡Stock.
Los perros se desconciertan, se asustan y pueden reaccionar con agresividad, además pierden la confianza en sus dueños. Foto: ¡Stock.

Asimismo, indicó que “el perro no recibirá ningún beneficio ni sentimiento positivo de este desafío; en cambio, puede preocuparse y experimentar sentimientos de desconfianza, lo que puede afectar al vínculo entre ambos. En el peor de los casos, podría tener consecuencias peligrosas para el dueño de la mascota”.

Algunos perros son muy tolerantes y no parecen afectados. Pero si te familiarizas con el lenguaje corporal de tu mascota, puedes empezar a ver que no se siente cómoda y puede mostrar signos de angustia.

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Los perros menos tolerantes, por haber ignorado las señales de advertencia, pueden reaccionar comprensiblemente por miedo, que es una reacción completamente natural para un perro cuando se siente asustado.

¿Cuándo empezó a hacerse tendencia el hashtag #barkatyourdog?

La tendencia parece haber comenzado en 2021, y el video más popular, con casi 25 millones de likes, muestra a un cachorro dando un cabezazo a su dueño como respuesta.

Otras tendencias similares han consistido en que los usuarios reproduzcan una serie de sonidos “desencadenantes” a sus perros, como juguetes chirriantes y silbidos agudos, para conseguir una reacción.

Lenguaje corporal del perro

La Sra. Spooner añade que es fundamental entender y responder al lenguaje corporal del perro para evitar llevarlo al límite.

Muchos de estos videos muestran a los perros en un estado de estrés: bostezando, lamiéndose los labios, echando las orejas hacia atrás, con el cuerpo tenso o mostrando el blanco de los ojos. Cuando no se reconocen las señales de su lenguaje corporal, es cuando podemos ver la escalada hacia los gruñidos, los chasquidos e incluso los mordiscos, para protegerse”, indicó.

Consecuencias de ladrarle al perro

Este reto implica estar en contacto muy estrecho con el perro y mantener un contacto visual prolongado.

Invadir el espacio de tu perro puede hacer que se sienta incómodo y preocupado, mientras que el contacto visual directo puede hacer que se sienta amenazado, una combinación peligrosa, que podría desencadenar una reacción grave de tu mascota.

Sorprender a tu perro ladrándole a la cara le resultará chocante, ya que no espera este comportamiento de un dueño en el que confía y con el que suele sentirse seguro.

La conmoción y el malestar que este desafío puede causarle a un perro tienen el potencial de generar un impacto duradero en el que el can podría reaccionar a cualquier incidente futuro donde están cara a cara con alguien, por ejemplo.

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