El uso del es básico para evitar que los músculos del pecho se descuelguen. Para asegurarte de que utilizas la talla adecuada, haz esta prueba:

* Levanta los dos brazos y su la piel del pecho empieza a asomar por debajo de la prenda, debes utilizar una talla más o modificar la longitud de los tirantes. Si en cambio, la piel se desborda por los costados (a la altura de tu axila), entonces definitivamente necesitas una medida superior.


* Reduce el uso de sujetadores con relleno ya que dificultan la transpiración.

* En cuanto al cierre. Normalmente estas prendas tienen tres posiciones en las que puedes abrochar. Para elegir el correcto abróchalo en el cierre central y cerciórate de que ajuste bien. La idea es que no te apriete o forme pliegues en la piel.


* Para practicar algún ejercicio, ponte un modelo de tipo deportivo, con tirantes gruesos.

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