¡Disolver, disolver!’

Este Búho recordaba la clásica película ‘El regreso de los muertos vivientes’, cuando las cámaras de televisión enfocaron a los congresistas, justo en el momento que se enteraban que el presidente Martín Vizcarra había disuelto el Congreso, en un sorpresivo mensaje a la Nación. La mayoría ‘fujiaprista’, con increíbles aliados habían maltratado a su antojo al premier Salvador del Solar, quien llegaba a exponer su ‘cuestión de confianza’ y se encontró con una humillante negativa, incluso le impidieron el ingreso.

No solo eso, se zurraron en su pedido de anular la elección de los miembros del Tribunal Constitucional, pues habían sacado uno entre ‘gallos y medianoche’ e inclusive tres de los magistrados convocados habían renunciado por el escándalo.

Pero seguramente la gota que derramó el vaso fue la elección de un primo del presidente del Congreso, que solo obtuvo 86 de los 87 votos requeridos, pero torpemente utilizaron el escaño de una congresista del Frente Amplio para que un voto ‘fantasma’ salga a su favor. Eso era un circo, mas bien, un monumental abuso.

Según un miembro del gabinete, que me dio la noticia minutos antes: ‘esto ya no se puede soportar mas’. Este Búho observaba una jornada humillante para el Ejecutivo y prepotente de la mayoría congresal, ‘borracha de poder’, que parecía cantar el tema de Celia Cruz y Willie Colón: ‘Usted abusó’.

Fueron tres las cuestiones de confianza que les lanzó Vizcarra y la tercera era la vencida. En las que el Congreso se zurró y se burló de los acuerdos con el Ejecutivo. Hubo también burlas, como llamar a una ‘Comisión de Venezia’ y al final ni siquiera les interesó sus conclusiones. Este columnista recibe mails de sus jóvenes lectores: Búho, ‘¿este es un golpe de Estado como dicen los congresistas?’.

Definitivamente NO. El presidente Vizcarra hizo hasta lo imposible para lograr algún consenso con la irracional oposición que puso trabas a todas las iniciativas del Ejecutivo. En su momento Fujimori, aconsejado por el siniestro asesor Vladimiro Montesinos, que tenía contactos con verdaderos generales golpistas, anunció ¡¡disolver, disolver!!, envió sus tanques a tomar el Congreso y se ejecutaron arrestos domiciliarios a congresistas de oposición, mientras los medios de comunicación eran intervenidos.

¿Eso hizo ayer Vizcarra? ¿Sacó los tanques como el Chino? No, porque, según su mensaje, está amparado estrictamente en la Constitución. Estos ojazos han vivido como periodista ambas ‘disoluciones’ y lo único que puedo decir es que desde esta columna siempre batallé porque el país debía mantener la gobernabilidad. Pero la Comisión de Constitución de Rosa Bartra hizo todo lo contrario, prácticamente echó a la basura los proyectos del Ejecutivo sin siquiera llevarlos al pleno, donde tranquilamente hubiesen podido rechazarlos pero dándole al oficialismo la oportunidad de defenderlos.

Lo de ayer fue penoso. Creo que el Congreso se ganó con honores la canción de Héctor Lavoe: ‘Todo tiene su final’. El espectáculo que protagonizó anoche Mercedes Aráoz fue realmente patético. Apago el televisor