Adictos a videojuegos
Seño María

Mi amigo, llegó al restaurante por un bistec a lo pobre con huevo frito, ensalada de lechuga con tomate y un refresco de cocona.

“María, cada vez son más los niños y adolescentes que pasan varias horas al día pegados a los videojuegos. Pese a que estamos en plena época escolar, muchos padres andan preocupados, pues no saben si sus hijos son adictos. Los especialistas señalan que una delgada línea es el límite entre el uso y abuso de estos juegos. Los adolescentes enviciados muestran determinados comportamientos que los padres no pueden pasar por alto. Por ejemplo:

-Dejan de preocuparse por su alimentación y hasta por su higiene personal.
-Pasan muchas horas jugando con el smartphone o la computadora sin dar muestras de sentir hambre. Incluso se les habla y no responden.
-Si no están con los videojuegos, se quedan pensando en qué momento volverán a jugar.
-Es más grave cuando hay signos de fatiga, cambios en los horarios de sueño y trastornos de conducta.
-Es peor cuando a la adicción se le suma la ansiedad o depresión.

Si su hijo tiene comportamientos de este tipo, busque ayuda profesional cuanto antes, pues las consecuencias pueden ser nefastas. Algunas son:

-Pierden la noción del tiempo cuando juegan. En casos graves, no saben si es de día o de noche. Solo duermen cuando ya no pueden aguantar el sueño.

-Olvidan a familiares y amigos, porque solo piensan en jugar. Ni quieren salir de casa con tal de estar en el juego.
-Disminuye el rendimiento en la escuela. Dedican menos horas a los estudios y estos ya no les importan. Muchos abandonan la escuela.
-Discuten y pelean con los padres cuando les piden que pasen menos tiempo con los juegos.
-El sedentarismo los vuelve proclives a la obesidad.

Si quieres evitar esta situación, entonces:

-Limita el tiempo de juego de tus hijos.
-No les des videojuegos para que te dejen descansar.
-No compres videojuegos. Jugar siempre lo mismo puede aburrir y así desalentar su uso.
-Ofrece a tus hijos actividades alternativas, como juegos de mesa, natación, fútbol, pintura y otros.
-Haz que tus niños respeten los límites que tú pones en casa. Es fundamental.
-Si sientes que el problema se te escapa de las manos, no dudes en buscar ayuda profesional”.

Gary tiene razón. Me voy, cuídense.

NOTICIAS SUGERIDAS

Contenido GEC