Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por su tacu tacu con bistec, sopa de verduras y, para tomar, naranjada bien fría. “María, el gobierno ya anunció que la última semana de marzo, tras dos años de enseñanza virtual producto de la pandemia de coronavirus.

LEE TAMBIÉN: El caso de Ivón Carnero Tapullima: Crimen sin perdón

Pero lo preocupante es que el titular del sector, Rosendo Serna, reveló ayer que más de 21 mil colegios están a punto de colapsar y no podrían recibir a los miles de estudiantes. Es urgente entonces repararlos lo más pronto posible, pues estamos a tan solo dos meses del inicio de las clases. Uno se pregunta ¿qué hicieron las autoridades de Educación en estos dos años? Sin alumnos en los colegios era un tiempo ideal para refaccionar los planteles con problemas. Los burócratas de ese ministerio ¿qué han hecho en todos estos meses? ¿Se la pasaron sentados sin hacer nada? ¿Por qué a sesenta días de iniciar las clases recién se dan cuenta que 21 mil colegios se pueden derrumbar?

El presidente sí es diligente cuando se trata de legalizar a su gremio de profesores muy cercanos al Movadef, como es el Fenatep, o para viajar en helicóptero, como millonario petrolero, para visitar a su familia en Chota, pero no para preocuparse por los estudiantes. Y eso que es profesor. En realidad uno esperaba al menos un mejor trabajo en ese campo porque es docente, pero nada.

Pero volvamos a los planteles con problemas, a estos trabajos que necesitan hay que agregar que tienen que adecuarse a los protocolos de bioseguridad necesarios para evitar que los alumnos se contagien con el coronavirus. Según el ministro de Salud, Hernando Cevallos, “estamos frente a la variante ómicron que claramente tiene una incidencia en la población pediátrica (niños), por eso no va a ser extraño que tengamos cada vez más casos de menores con complicaciones severas en nuestro país”.

Entonces, ojalá que el 28 de marzo, fecha tentativa, ningún colegio deje de funcionar porque falta pintar, reforzar una pared o porque no hay mobiliario. Y no me digan que no hay dinero, porque sí hay. Sino ¿cómo autorizan la compra de bocaditos por cerca de 150 mil soles para los consejos de ministros? ¿Cómo pagan decenas de millones de dólares por consultorías, muchas veces inútiles, en todos los organismos del Estado? El ministro Serna, quien también es profesor, debe ponerse las pilas en estos dos meses para que los alumnos vayan a la segura a los planteles”. Pucha, mi amigo Gary tiene razón con los colegios. Que los arreglen de una vez. Me voy, cuídense.

TE PUEDE INTERESAR

Contenido sugerido

Contenido GEC