Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por su sancochado, escabeche de pollo y, para tomar, refresco de mandarina heladito. “María, vengo impresionado con el caso del llamado ‘Rey de los ceviches’, don Javier Vargas, a quien una banda de extorsionadores le quemó su casa de dos pisos, en San Juan de Lurigancho, porque no accedió a pagarles un cupo de cinco mil dólares.

Contenido sugerido

Contenido GEC