La pequeña Bethany Thompson de 11 años logró sobrevivir al que la afligía. Sin embargo, ya estaba harta de las burlas de sus compañeros que no paraban de molestarla cada vez que tenían oportunidad.

Y es que el cáncer cerebral que pudo superar gracias a varios tratamientos de radiación la dejó con secuelas. Su sistema nervioso resultó dañado permanentemente y su boca quedó torcida.

Según su madre, Wendy Feuch, su boca torcida y cabellera rizada fueron suficientes para convertirla en objeto de burla de sus compañeros. Es así que agobiada por el bullying, decidió quitarse la vida.

El día que se suicidó, Bethany habló con su mejor amiga y le dijo que cuando llegara a su casa terminaría con su vida. Así fue que llegó a su hogar, se dirigió al patio trasero, sacó un arma que sus padres ocultaban y se disparó.

Cabe indicar que la madre de Bethany informó en varias oportunidades al colegio la tragedia por la que estaba pasando su hija víctima de los abusadores, sin embargo nunca se animaron a hacer nada por la niña.

TAMBIÉN PUEDES LEER

Si te interesó lo que acabas de leer, puedes seguir nuestras últimas publicaciones por , , y puedes suscribirte a nuestro newsletter.

NOTICIAS SUGERIDAS

Contenido GEC