El actor reconoció haber tenido relaciones sexuales con su compañera Génesis Rodríguez, pero dijo que fue con el consentimiento de la entonces menor de edad (Foto: Mauricio Islas / Instagram)
El actor reconoció haber tenido relaciones sexuales con su compañera Génesis Rodríguez, pero dijo que fue con el consentimiento de la entonces menor de edad (Foto: Mauricio Islas / Instagram)

Un escándalo que sacudió el mundo del espectáculo ocurrió el año 2004 durante las grabaciones de la telenovela “Prisionera”. Los protagonistas de este hecho fueron , luego de que el actor fue acusado de haber tenido relaciones sexuales con su compañera de reparto, quien por aquel entonces era menor de edad.

MIRA AQUÍ: Génesis Rodríguez y la razón por la que se retiró de las telenovelas

Todo ocurrió tres meses después del inicio del rodaje de la novela tras una fiesta que organizó el reparto. Al conocer que su hija había tenido intimidad con alguien mucho mayor, José Luis Rodríguez ‘El Puma’, su padre, decidió denunciar por abuso sexual al actor principal de la novela. Debido a que este suceso opacó la producción de Telemundo, el galán fue reemplazado por otro histrión.

Después de 16 años, el actor decidió hablar de este y otros temas en el programa . Ahí dio a conocer todo lo que vivió tras la acusación de violación en su contra.

El año 2004, el actor fue acusado de abusar de la joven quien tenía 17 años y él 31 años. (Foto: AFP | Instagram de Mauricio Islas)
El año 2004, el actor fue acusado de abusar de la joven quien tenía 17 años y él 31 años. (Foto: AFP | Instagram de Mauricio Islas)

“YA NO QUERÍA VIVIR”

Al ser consultado sobre el escándalo en el que se vio envuelto, Mauricio Islas dijo que aquel año le tocó vivir un momento muy fuerte y si en realidad hubiera abusado sexualmente de Génesis Rodríguez, él no habría quedado libre, sobre todo porque el caso se llevó en Estados Unidos. “Yo sabía que se tenía que arreglar tarde o temprano porque las cosas [que se dijeron] no eran así. El proceso duró cuatro meses y fue muy duro, pues me veían como que era el peor del mundo”.

Asimismo, indicó que esta experiencia lo ayudó a conocerse más, pues descubrió que era muy vulnerable. “No dormía. Era tanta mi desesperación que me metí al clóset y me encerré; de repente dije: ‘Ya no quiero vivir, ya no quiero saber más nada’. Cuando salí habían pasado siete horas (…). También recuerdo que una vez tuve que salir en la cajuela del coche para poder ver a mis abogados”.

Contó que la difícil experiencia que vivió en 2004 hizo que volvieran sus inseguridades y miedos de la infancia, pero sobre todo lo ayudaron a ser una persona fuerte. “Todo fue bien revelador. Me ayudó a conocer a Mau. Yo no sabía qué tan afectado estaba ese niño, qué tan vulnerable era (…). Pero, así como había gente que pensaba que yo era lo peor, también había quienes me daban seguridad y creían en mí”.

Tras el escándalo, el actor se divorció de su esposa Patricia Villasan, con quien tiene una hija (Foto: Mauricio Islas / Instagram)
Tras el escándalo, el actor se divorció de su esposa Patricia Villasan, con quien tiene una hija (Foto: Mauricio Islas / Instagram)

SE HIZO RESPONSABLE DE SUS ACTOS

Luego de esta experiencia, Islas decidió hacerse cargo de los actos que había cometido y el mismo año, decidió reconocer que había tenido relaciones sexuales con Génesis Rodríguez, pero con el consentimiento de la entonces menor de edad. “Me tocó vivir una situación que me quiso enseñar algo”, dijo.

Lamentablemente para él, sus acciones tuvieron gran repercusión en su vida familiar y el divorcio llegó. “Las cosas entre nosotros ya no funcionaban y al yo venir de padres divorciados, preferí jugarme todas mis cartas por mi hija, quien no merecía ver a sus progenitores pelearse, ni que sienta la sensación de abandono que viví, yo le pedí [a mi esposa] el divorcio y ahí vino otro tema, pero lo que más me tronó la vida fue que no pude ver a mi hija siete meses”.

Para el actor, el fin de su matrimonio lo afectó demasiado. “Pisé fondo, no me bañaba varios días y me di al abandono. Mis amigos me preguntaban cómo me sentía porque no me veían bien. Luego de eso vino un hada madrina que me habló de una situación difícil que atravesó y me invitó ir a rehabilitarme emocionalmente a Guadalajara (…). Yo estaba deprimido, yo era adicto a vivir mal y sufrir. Tanto así que si no sufría, sentía que no estaba vivo. Tuve relaciones destructivas y lo único que me salvó fue mi trabajo”.

El año 2007 inició un romance con Paloma Quezada con quien tiene otros dos hijos: Emiliano y Frida.

Contenido sugerido

Contenido GEC